En este y en todos los días, hay que respetarlas, respetar su ideología, su tiempo y espacio, sus decisiones, su incansable lucha.
Las niñas y mujeres, merecen seguridad, igualdad de oportunidades, libertad de expresión. No es cuestión de un día, es una lucha diaria, para que puedan salir y sentir seguridad en cada paso que den.